Eran las 12.30 en el nike de palermo soho, y una camioneta estaciona en la puerta. Entre algunas personas amontonadas baja él, Dylan Raasch, uno de los iconos más influyentes en la cultura sneakerhead. Nos saluda muy cordialmente con un apretón de manos y casi como si fuera un amigo que nos visita siempre nos ayuda acomodar unos sillones para hablar con nosotros. Les juro que romper el hielo con un diseñador de esta calaña es tan difícil, que nunca sabes si tu primera pregunta va a ser suficiente. La charla fue tan amena, que hasta parecía ser algo cotidiano.
Entre varios temas que se hablaron, se conversó sobre la roshe one y los desafíos en el desarrollo de la roshe two. Nos contó como su concepto se amplió hacia tecnologías más útiles a la hora de la confección, y como la suela posee tres densidades distintas de material para encapar la pieza única de la bota.
Para quienes no lo sepan, Dylan no sólo es el creador de roshe, sino que también ha sido responsable de la confección de la AirMax95 ultra y de la última collección de sneakerboots. Pero más preponderante aún, es el Director senior de calzado Sporstwear de Nike.
Entre muchas de las cosas que pudimos hablar entre risas y miradas cómplices, no sólo hablamos de proyectos futuros sino que también nos adelantó algunas experiencias que están logrando en impresoras 3D. Cómo somos sneakerheads y no pudimos con nuestro genio, le preguntamos acerca de las Yeezy y su polémica sobre la comparación a la Roshe. No abarcó mucho el tema, pero una sonrisa cómplice lo dijo todo.
Todo esto que les contamos duró solo 30 minutos, pero parecía que hablamos 3 horas.
Gracias a Nike Sportswear por esta gran posibilidad, es un sueño cumplido.